La póliza de segunda capa proporciona una seguridad importante para los profesionales de la arquitectura en el desempeño de sus funciones. Los arquitectos y arquitectos técnicos son los responsables de la creación y supervisión de proyectos de construcción. Sin embargo, este proceso no está exento de riesgos, y la posibilidad de ocasionar daños personales es una preocupación constante. Los daños personales pueden surgir en situaciones imprevistas y pueden tener consecuencias financieras y legales significativas para los profesionales involucrados. En este contexto, las pólizas de seguro de responsabilidad civil con coberturas de segunda capa emergen como una salvaguardia esencial para proteger tanto a los profesionales como a las partes afectadas.
Los daños más importantes son los personales
Los daños personales en el ámbito de la arquitectura pueden variar desde lesiones físicas hasta daños emocionales y perjuicios económicos sufridos por terceros debido a negligencia, errores u omisiones. Estos daños pueden surgir de situaciones imprevistas e involucrar a trabajadores de la construcción, residentes cercanos, visitantes al sitio e incluso a los propios clientes. Los costes asociados con tales daños pueden ser enormes y pueden poner en peligro la estabilidad financiera y reputación de los arquitectos y arquitectos técnicos involucrados.
Baremo de daños de España
En España, el baremo de daños personales es un sistema que establece indemnizaciones para las víctimas de accidentes de tráfico. Aunque este baremo proceda de otro ámbito diferente a los daños personales en proyectos de construcción, ofrece un marco de referencia comúnmente aceptado para comprender la valoración de daños en situaciones similares. El coste de los daños personales puede incluir gastos médicos, pérdida de ingresos, daño moral y otros elementos que deben ser considerados al determinar la cobertura adecuada en los seguros de responsabilidad civil.
En 2016, la normativa al respecto implementó un cambio fundamental en su baremo de daños personales, lo que tuvo un impacto significativo en la manera en que se evalúan y compensan los daños en situaciones de accidentes. Este cambio en el baremo fue un reconocimiento de la necesidad de ajustar las cuantías indemnizatorias para reflejar de manera más precisa los costes y el impacto de los daños sufridos por las víctimas. Esta reforma tuvo como objetivo garantizar que las indemnizaciones fueran más justas y proporcionadas a la gravedad de las lesiones y las consecuencias económicas.
Uno de los aspectos clave de esta reforma fue el aumento de las cuantías de indemnización para los daños graves. Esto incluyó una revisión de los montantes asignados a conceptos como invalidez permanente y secuelas graves. Estos cambios reflejaron tanto los costes médicos como las pérdidas económicas que podrían surgir como resultado de estas lesiones.
Por otro lado, mientras que las indemnizaciones por daños graves aumentaron, las cuantías para los daños leves se ajustaron a la baja. Esto fue en parte una medida para alinear las compensaciones con la verdadera magnitud de los daños sufridos, evitando situaciones en las que las indemnizaciones por daños menores fueran desproporcionadamente altas en comparación con los daños más graves.
Implicaciones para los seguros de Arquitectos y Arquitectos Técnicos
Dada la importancia de los daños personales y la revisión del baremo en 2016, es esencial que los arquitectos y arquitectos técnicos sean plenamente conscientes de las implicaciones de estos cambios en sus pólizas de seguro de responsabilidad civil. Los daños personales en proyectos de construcción pueden variar desde lesiones menores hasta casos graves que requieren costosas rehabilitaciones médicas y pueden generar indemnizaciones significativas de acuerdo con esta nueva baremación. Descuidar esta faceta de las coberturas de una póliza de seguros puede resultar en una situación muy complicada, si ocurren incidentes en los que estén implicados daños personales que se consideren graves.
Tener en cuenta estos cambios subraya la necesidad de contar con pólizas de seguro de responsabilidad civil que estén adecuadamente ajustadas a los montantes de indemnización actualizados. Si bien las pólizas de responsabilidad civil tradicionales proporcionan una capa de protección esencial, las pólizas de segunda capa cobran una relevancia aún mayor en este contexto. Estas pólizas pueden ofrecer límites de cobertura más altos y, por lo tanto, garantizar que los profesionales estén protegidos en caso de daños personales graves que superen los límites de las pólizas estándar.
La póliza de segunda capa de Sofise
Las pólizas de segunda capa se han convertido en una herramienta vital en la gestión de riesgos para arquitectos y arquitectos técnicos. Como hemos apuntado antes, estas pólizas complementan las coberturas estándar de responsabilidad civil, proporcionando una capa adicional de protección en caso de que los daños personales superen los límites de cobertura establecidos en las pólizas habituales. La póliza de segunda capa se activa una vez que los límites de la póliza primaria han sido alcanzados, garantizando así una protección más amplia y profunda en situaciones de alto riesgo.
Las pólizas de segunda capa de Sofise ofrecen a los profesionales de la arquitectura la opción de aumentar el capital contratado para adecuarlo a estas necesidades de cobertura. Asesorarse por profesionales de la correduría de seguros experimentados y especializados en el ámbito de la arquitectura siempre es buena idea. Si tienes cualquier duda sobre este tema, cuenta con nosotros.